
las lavándulas...

Aún hace frío, y suelo acercarme a ver a los primeros barbos remontar el arroyo más "tempranero" que conozco, el primer cauce que se llena de estos magníficos peces. En Febrero, tras las lluvias invernales y aún con las aguas algo tomadas, podemos ver entrar y salir del arroyo pequeños bancos de peces, los podemos ver comer en su desembocadura; en definitiva, aclimatarse al remonte y perder el miedo a su nuevo hábitat (temporal).


Pasado un mes el cambio es drástico, explosivo. La primavera despierta...



Galápago

Somormujo Lavanco (Podiceps cristatus)

Zampullín chico (Tachybaptus ruficollis)


Ranúnculos...


Cigueñuela (Himantopus himantopus)

Las Ranitas meridionales (Hyla meridionalis)


Eslizón ibérico (Chalcides bedriagai)

Rana perezi

Focha común (Fulica atra)









Y como no... la freza del barbo.










Se acerca Mayo y vemos a la Tarabilla común (Saxicola torquatus)


Con la falta de lluvias y el esfuerzo reproductivo, los primeros barbos mueren extenuados...


Pero nada se desaprovecha
Milano real (Milvus milvus)


unos metros más arriba me encuentro con una sorpresa, el barbo albino, ese que entraba todos los años en el mismo arroyo, ha muerto, una preciosa hembra de menos de dos Kg. de peso nos deja...

los primeros alevines se ven en las orillas, millones de nuevos individuos que espero sobrevivan a luciopercas, black bass, siluros, percasoles...




Anochece y... es ahora cuando las Ranitas meridionales se muestran activas, los machos comienzan con su ópera prima, un recital que merece la pena ser escuchado... un año más nada se ha perdido, hasta la próxima!.

Hugs!
Pedro.